La situación actual, sin duda, está poniendo a prueba a todos, tanto personas como organizaciones, pero debo decir que la palabra que mejor define en estos momentos cómo me siento es: gratitud. En lo que respecta a Alibaba Group, agradecimiento a mis compañeros, tanto en España como internacionalmente, porque compruebo a diario su esfuerzo por seguir impulsando el comercio y la digitalización de las empresas. Todos nosotros sabemos que para superar una crisis hay ingredientes imprescindibles como son el trabajo y la innovación. En chino la palabra crisis está compuesta por dos caracteres: “peligro” y “oportunidad”. En este sentido, nosotros nos esforzamos en poner a disposición de las empresas la tecnología de Alibaba para que adapten sus negocios y puedan sobrevivir, e incluso crecer, pese a las circunstancias adversas.

En mi caso, estoy principalmente centrada en dar a conocer en España las enormes posibilidades del ecosistema de Alibaba Group, en el que nuestras diversas unidades de negocio se complementan para hacer posible el llamado New Retail, una realidad al 100% en China. Este enfoque, el de integrar el mundo offline y online para dar un mejor servicio que se adapte a las necesidades de los clientes y a circunstancias cambiantes, se está revelando actualmente el más idóneo, incluso en escenarios de crisis como el que ha vivido China recientemente.

En concreto, trabajo intensamente para compartir las posibilidades que ofrece la plataforma Alipay a las empresas, tanto como medio de pago sin contacto en negocios físicos a través del móvil como como medio de pago online integrado en webs de comercio electrónico.

En el primer ámbito, Alipay es lo que se denomina una superaplicación, que sirve para pagar en establecimientos físicos como comercios, atracciones turísticas, medios de transporte, etc. sin contacto, ya que el pago se realiza con solo escanear un código QR. Pero, además, Alipay es una potente herramienta de marketing para los comercios porque posibilita que su propuesta de servicios o productos, ofertas, etc. lleguen a los clientes a través de geolocalización. En China, donde he vivido varios años, no puedes hacer prácticamente nada sin tener Alipay instalado en tu móvil, más de 900 millones de personas allí lo usan y en el mundo son 1,2 billones. No es necesario llevar dinero físico ni tarjetas, lo que proporciona mucha libertad y evita el riesgo de contagios porque, como he mencionado, no implica contacto al pagar. Hay emprendedores que incluso durante la crisis logran ampliar su clientela. Fue el caso del dueño de varios establecimientos de máquinas recreativas en China. Al tener que cerrarlos por el confinamiento, desarrolló con ayuda de Alipay, un juego virtual de máquinas recreativas que fue todo un éxito y que ha ampliado su clientela.  Alipay ha servido también a organismos públicos que querían reanudar el turismo en sus zonas y que distribuyeron a través de la aplicación cupones de descuentos como incentivo.

Además, querría destacar la rapidez con la que se han creado miniprogramas de búsqueda de empleo en Alipay como una feria virtual en la que 60.000 empresas anunciaron sus vacantes. Así, desde que comenzó la pandemia, 1,64 millones de personas han usado Alipay para conseguir trabajos en ámbitos tan dispares como la Inteligencia Artificial o el reparto a domicilio.

Teniendo todo esto en cuenta, soy optimista con respecto al escenario post-COVID-19 porque veo que son muchas las pymes digitales que están demostrando una increíble resistencia y vitalidad durante la pandemia. Y lo que también está claro para mí es que las tecnologías contactless jugarán un papel muy importante, así como las pymes que sepan aprovechar las oportunidades de la digitalización, ya que saldrán reforzadas de la crisis.

Alba Ruiz

Responsable del Desarrollo de Negocio en España y Portugal de Alibaba Group