Segunda entrega y broche final del especial ‘La mujer en el sector pesquero y acuícola’.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) publicó un informe en mayo de 2015 en el que indicaba que las mujeres constituían, desde un punto de vista internacional, el 50% de la fuerza laboral en el sector pesquero y acuícola. De hecho, en África Occidental y Asia, hasta el 80% de la comercialización de los alimentos marinos está a cargo de estas. A pesar de los datos, el trabajo femenino en este ámbito sigue sin poseer el reconocimiento que debería. La representación de las mujeres en puestos de liderazgo se sitúa por debajo de otros sectores, no cuentan con una remuneración acorde al trabajo realizado y cada día se enfrentan a diversos inconvenientes que limitan su accesibilidad a los recursos necesarios e impiden su adecuado desarrollo profesional.

Este mismo informe indicaba que de las 100 empresas pesqueras más importantes del mundo, tan sólo una estaba presidida por una mujer. De este modo, la presencia femenina en el sector pesquero y acuícola es susceptible de incrementar su protagonismo y liderazgo, ya que, tal y como indica la ONU, una mayor presencia de la mujer en dicho ámbito, así como en el medio rural en general, contribuiría a consolidar la seguridad alimentaria de los países en desarrollo.

unnamed 350Durante años, las mujeres se han enfrentado a diversas trabas y limitaciones que impedían el adecuado desarrollo de su capacidad emprendedora y el sector acuícola y pesquero se ha visto especialmente afectado por esta dinámica global. El género femenino permanecía relegado a trabajos de menor reconocimiento, calidad y remuneración.

Así, mientras que en los países en desarrollo las mujeres se enfrentan a la falta de derechos de propiedad y el acceso limitado a los créditos, Europa destaca por un inferior porcentaje de mujeres en los cargos ejecutivos y puestos directivos. Concretamente en España, según datos del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medioambiente, la participación femenina en los órganos de dirección de los grupos de pesca se sitúa en el 28,90% frente al 71,10% masculina. Una tendencia a la que, poco a poco, se está haciendo frente desde las diferentes administraciones y organismos internacionales; es el caso de la FAO, que actualmente trabaja con empresas, asociaciones del sector pesquero y universidades para crear una nueva red para las mujeres en la industria con el fin de darles una mayor visibilidad en posiciones de liderazgo y atraer a más profesionales al sector.

Y es verdad que la presencia femenina se ha incrementado de forma considerable a lo largo de los últimos años. Armadoras, rederas, mariscadoras, neskatillas, empacadoras… miles de mujeres desarrollan su trabajo en las diversas profesiones del ámbito pesquero y marítimo y cada vez hay un mayor número de patronas de cofradías de pescadores, directivas de empresas y presidentas de federaciones y asociaciones, aunque, por el momento, esta representación está aún lejos de ser equitativa y las mujeres se concentran en determinados sectores de actividad.

Así, los datos de diciembre de 2013 del Instituto Social de la Marina, en referencia a la actividad extractiva, mostraban que de los 34.404 afiliados al Régimen Especial del Mar, 6.010 eran mujeres, lo que suponía tan sólo un 17,47%. Por el contrario, la mujer prevalecía aquellas tareas relacionadas con la confección y reparación de redes, además del marisqueo.

Un año de metas alcanzadas. 

2015 ha sido para España un año lleno de importantes hitos en el ámbito pesquero y acuícola. En primer lugar, ha entrado en vigor la Ley 47/2015, de 21 de octubre, reguladora de la protección social de las personas trabajadoras del sector marítimo pesquero. Una normativa que ha aprobado la incorporación al ámbito de protección del Régimen Especial del Mar de nuevos colectivos de mujeres como es el caso de las rederas, neskatillas y empacadoras. Asimismo, en el pasado mes de octubre, el Consejo de Ministros dio el visto bueno al Plan para la Promoción de las Mujeres del Medio Rural (2015-2018). Este texto prevé una serie de acciones enmarcadas en diferentes ámbitos de actividad como la participación de las mujeres rurales y pesqueras en la toma de decisiones, la promoción de la conciliación y de la corresponsabilidad, la incorporación de la igualdad de oportunidades en el diseño de políticas de fomento y el impulso del conocimiento sobre la situación de las mujeres en estos sectores.

También se ha publicado el Plan para la Igualdad de Género en el Sector Pesquero y Acuícola para el período 2015-2020, que pretende, entre otros objetivos, promover la incorporación laboral de las mujeres al sector, así como el emprendimiento femenino y la mejora de las condiciones de trabajo. Además, se han otorgado los primeros certificados de profesionalidad en actividades que hasta el momento no contaban con ningún reconocimiento. Y se ha avanzado en derechos sociales mediante la adaptación de los coeficientes correctores de la edad de jubilación, el reconocimiento de enfermedades profesionales o la mejora y adecuación de las instalaciones y espacios de trabajo.

A lo largo de este año también han surgido nuevos organismos de representación como la Federación de Mujeres Trabajadoras del Mar de Euskadi y la Federación Española de Mujeres de la Pesca, cuya creación ha sido coordinada por la Confederación Española de Pesca (CEPESCA), en colaboración con la Secretaría General de Pesca del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, y cuyo objetivo es dar una mayor visibilidad a las profesionales del mar que intervienen en la pesca, el marisqueo y el resto de actividades de la industria auxiliar, así como incrementar la conciencia social sobre la importancia de su contribución al sector, con el fin de impulsar el liderazgo femenino y su participación en los órganos representativos decisorios y consultivos del sector. Asimismo, el año anterior entró en vigor la Ley 33/2014, de 26 de diciembre, por la que se modifica la Ley 3/2001, de 26 de marzo, de Pesca Marítima del Estado.

En definitiva y, tal y como informa la FAO, las diversas profesiones enmarcadas en el ámbito pesquero y acuícola ofrecen sustento a más de 120 millones de personas, además el pescado es una importante fuente de nutrición en todo el mundo. De este modo y, desde un punto de vista global, una mayor igualdad de género en este ámbito incrementaría su producción y estaría ligada a una creciente seguridad alimentaria.

Ministerio de Agricultura, Alimentación
y Medio Ambiente. Secretaría General
Técnica. Boletín informativo Red Española de Mujeres En el Sector Pesquero. 2015
FAO: La Organización de las Naciones
Unidas para la Alimentación y la Agricultura

María Cano Rico