La igualdad -o desigualdad- de género es, sin duda, uno de los principales debates de nuestro tiempo. Ya sólo el hecho de que necesitemos hablar sobre ello y reivindicar el papel femenino en el mundo laboral y la necesidad de políticas que faciliten la conciliación, vuelve a poner sobre la mesa todo el camino que queda por recorrer en este sentido.
Nuestra visión como compañía es crear un mejor día a día para la mayoría de las personas, y todas las personas que formamos IKEA dedicamos nuestros esfuerzos a hacer de nuestra compañía un lugar cada vez mejor para trabajar, diverso, plural e inclusivo, una prioridad para nosotros.
La diversidad es un valor cl
ave que nos guía y que ofrece a todo el mundo las mismas oportunidades. Diversidad e inclusión son dos conceptos que en IKEA van de la mano.
Todas las personas que trabajamos en IKEA tenemos la responsabilidad de ofrecer las mismas oportunidades independientemente de género, edad, nacionalidad, orientación sexual,etc. y queremos ser una empresa inclusiva basada en un entorno de trabajo en el que nuestros colaboradores se sientan bienvenidos, respetados, apoyados y apreciados y también, en el desarrollo de una infraestructura con formas de trabajo colaborativas, sacando el máximo partido a nuestras diferencias. En IKEA nos importan las personas y creemos en el talento que cada una de ellas aporta y, por eso, animamos a todas las personas que forman IKEA a que sean ellas mismas, ya que la singularidad de cada una de ellas construye un IKEA mejor.
Esta inclusión tiene también un reflejo en nuestra particular forma de entender el liderazgo: un
liderazgo basado en la capacidad de aunar voluntades de equipos diversos hacia fines comunes, un liderazgo cercano y participativo.
Animamos a nuestros líderes a reclutar a equipos diversos, ya que pensamos que la diversidad fomenta la creatividad, favorece la innovación, produce una mayor satisfacción en el ambiente de trabajo y, en definitiva, los equipos diversos pueden entender mejor las necesidades de nuestros clientes.
Para nosotros, el verdadero líder es aquel que desarrolla la capacidad de formar un liderazgo en cascada creando espacios donde se potencien la creatividad y el talento de todo el equipo, y permitiendo que cada persona tenga su rol, independientemente del género o edad. Aquí toma también especial protagonismo la capacidad de liderar con el ejemplo, que es otro de nuestros valores más arraigados desde la propia concepción de la compañía.
En nuestro caso, consideramos fundamental el equilibrio de género en la empresa, no sólo porque mejora los resultados del negocio y conduce a una mayor eficacia, sino porque las diferencias entre personas nos enriquece realmente y genera equipos más creativos e innovadores.
En IKEA Ibérica, donde la presencia de la mujer es cada vez más destacada, pues ocupa ya seis de cada diez puestos y más de la mitad dentro de los puestos directivos, la visión para fomentar el equilibrio de género y la diversidad en la empresa y alta dirección está relacionada con una mejora de la creatividad, con mayores y mejores ideas, más propicio a la innovación dentro de la compañía, mayor satisfacción en el entorno laboral y la eficacia en la resolución de problemas. En definitiva, una compañía que entiende mejor las necesidades de sus clientes y consigue mejores resultados.
Dentro de nuestra política de igualdad, aplicamos una serie de medidas enfocadas a crear un mejor día a día para nuestros colaboradores y colaboradoras. Contamos con un Plan de Igualdad específico para avanzar en la igualdad de oportunidades y trato entre hombres y mujeres. Los objetivos generales de este plan son:
– Integrar aún más la perspectiva de género en la gestión de la empresa.
– Facilitar el ejercicio de la conciliación de la vida personal, familiar y laboral y fomentar la corresponsabilidad entre hombres y mujeres.
Por supuesto, no tenemos la llave maestra para el triunfo definitivo de la igualdad en el ámbito laboral, pero sí creemos estar dando pequeños pasos de gigante en este sentido. No hay una guía categórica sobre cómo lograrlo pero, desde mi propia perspectiva y experiencia en IKEA, diría que el progreso en este sentido pasa por estar atentos a lo que sucede a nuestro alrededor, abrir bien los ojos y fijarnos en las buenas prácticas que diferentes agentes vienen impulsando. También en la inspiración conjunta puede estar el cambio, un cambio que todos y todas a nivel individual debemos interiorizar, y desde nuestras posiciones, ser embajadores y embajadoras de la igualdad de oportunidades. Y esto es algo que en IKEA tenemos, muy pero que muy presente.
Elena López
Responsable de Igualdad y Diversidad
IKEA Ibérica
