Con un +1,6% frente a un +1,2 Andalucía es la comunidad con una cifra más alta de trabajadoras por cuenta propia según ATA, la creación de empleo femenino ha sido superior

España ha cerrado 2015 con más de tres millones de personas inscritas en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA). Un dato del que se desprende la idea de que la mujer ha ido ganando un protagonismo creciente en el mundo del autoempleo. El mayor espíritud emprendedor femenino o la crisis económica ligada a la elevada tasa de desempleo, son algunos de los factores que explican el incremento de la presencia femenina en el RETA.

Un informe de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos-ATA corrobora esta idea, indicando que el ritmo de creación de empleo autónomo femenino el año pasado ha sido superior al registrado por los varones. Así, mientras los varones aumentaron un +1,2%, las mujeres lo hicieron un +1,6%. En valores absAutonomas18olutos, de los 42.193 nuevos cotizantes, 17.677 son mujeres (41,9%) frente a los 24.516 hombres. Asimismo, el estudio sobre Empresarios Individuales, realizado por Informa D&B, indica que Asturias y Galicia son las comunidades con un porcentaje más elevado de mujeres autónomas, seguida por regiones como Valencia y la Rioja con un 36%. Por su parte, teniendo en cuenta números absolutos, Andalucía es la comunidad con una cifra más alta de trabajadoras por cuenta propia, 110.921; seguida de Cataluña con un total de 97.171 autónomas y Valencia con 75.756. En el lado contrario se encuentran Castilla-La Mancha con un 32,15%, Canarias con un 31,82% y Madrid con un 30,92%.

Por sectores de actividad, la mayor proporción de autónomas se registra en el ámbito de la sanidad, donde el porcentaje asciende a un 72%; seguida de otros servicios, que llega al 63% y la educación con un 54%. La menor representación femenina se sitúa en los transportes con un 7%, las industrias extractivas que alcanza un punto más y la agricultura que se sitúa en el 15%. En el resto de sectores, la tasa oscila entre el 20% y el 50%. Con respecto a las ramas de actividad, en la industria textil la tasa de mujeres autónomas se sitúa en el 56% y en la hostelería en el 53%.

En cifras globales, el sector que cuenta con más empresarias individuales es el comercio, con 231.609 autónomas, mientras que 120.173 trabajadoras por cuenta propia ejercen su actividad en el sector inmobiliario. Por el contrario, las industrias extractivas tan sólo contabilizan 139 empresarias individuales. Actualmente, la mujer autónoma abarca un espectro muy amplio. Por un lado, se encuentran las emprendedoras que se dividen entre aquellas que han puesto en marcha un proyecto propio y las que han sido obligadas a elegir esta vía ante la imposibilidad de encontrar un trabajo asalariado o mejorar su posición en el trabajo que tenían. Y, finalmente, también encontramos a aquellas mujeres que, por determinadas condiciones, no tienen más remedio que darse de alta como autónomas para poder desarrollarse profesionalmente en el trabajo al que están ligadas.

En definitiva, cada vez son más las mujeres que apuestan por ser autónomas, ya que las ventajas desde el punto de vista legal son cada vez mayores para las trabajadoras por cuenta propia. Además, es una forma empresarial que permite una mayor independencia profesional y económica.
Marco normativo
La legislación contempla una serie de medidas que ponen valor a los trabajadores por cuenta propia. Por un lado, la tarifa plana que permite que los autónomos puedan disfrutar durante un periodo de seis meses de una cuota a la Seguridad Social de 50 euros. Además, podrán compaginar durante un máximo de nueve meses la prestación por desempleo con el alta en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA), una posibilidad de la que sólo podían beneficiarse hasta el momento los menores de 30 años. De esta medida quedan excluidos quienes hayan obtenido el pago único de la prestación por desempleo en los 24 meses inmediatamente anteriores a la aplicación de la normativa y los que suscriban un contrato con la empresa o empleador para los que hubiese prestado sus servicios por cuenta ajena con anterioridad.

Por otro lado, la normativa permite que los desempleados puedan solicitar el 100% de la prestación por desempleo en un pago único. De esta manera, al cobrar la totalidad de la cuantía podrán hacer frente a los múltiples gastos que supone poner en marcha un negocio. Además, la ley garantiza la ampliación del plazo para disponer de la prestación por desempleo de los 24 meses a los 60 meses en caso de interrupción. Finalmente, este texto legal facilita que los autónomos económicamente dependientes -aquellos en los que el 75% de sus ingresos proceden de un único cliente o empresa- contraten a un trabajador que les sustituya para poder conciliar así la vida laboral y familiar. Además, desde septiembre de 2015, el Tribunal Económico-Administrativo Central (TEAC) posibilita que los autónomos que trabajen desde su hogar puedan deducir en el IRPF gastos como el gas, la electricidad, el teléfono o el agua.