Un proyecto de y para las mujeres refugiadas en Shatila
El evento Woman4Change es un proyecto de la Fundación Esperanza Pertusa, eje de Responsabilidad Social de la firma de calzado Gioseppo.
Woman4Change nació hace dos años con la misión de dar apoyo y visibilidad a mujeres que están trabajando por construir un mundo mejor. Personas líderes en sus comunidades y en sus organizaciones que están transformando la realidad a través del poder de las alianzas, de la creatividad, de la visión a largo plazo, del inmenso poder de la compasión.
Este año, Woman4Change ha querido dar voz y apoyo a las mujeres refugiadas Sirias.
Las personas refugiadas viven una situación terrible. Sabemos que, como en otros conflictos, las mujeres, adolescentes y niñas sufren unos riesgos extras por su condición de mujer. Sin embargo, es mucho menos conocida la aportación que muchas mujeres refugiadas están realizando para la reconstrucción y la paz, para el diseño de un futuro mejor que nos beneficiará a todos.
Mujeres que disparan con su voz, en lugar de con armas.
Mujeres que hacen de sus tradiciones un medio para el desarrollo económico en lugar de un argumento para la exclusión.
Mujeres que trabajan para que el destierro no signifique el fin de toda aspiración a una vida digna, 
fomentando la educación, la salud y el empoderamiento económico en un ecosistema de traumas, como es un campo de refugiados.
Este año, Woman4Change ha dado todo su apoyo a uno de estos proyectos: El programa para Mujeres de la ONG sirio-libanesa Sonrisas y aceitunas. Toda la recaudación de la venta de la pulsera W4C, así como la recaudación de la cena de la Fundación Esperanza Pertusa se destinará a esta ONG. Además, Gioseppo ha creado una colección de sandalias realizadas con los bordados que producen mujeres refugiadas sirias en campos de Líbano. En estos talleres un amplio grupo de mujeres encuentra empleo, un lugar seguro y digno y un espacio en el que recuperar algo de esperanza.
Hemos visitado el campo de refugiados de Shatila, donde nació Sonrisas y Aceitunas hace cuatro años. Hemos conocido sus proyectos. Quedamos admiradas por su organización y la determinación de su equipo humano. Sonrisas y Aceitunas recibió el Premio de Cáritas Internacional por su actividad en 2015 y todos los días reciben el premio de ver el impacto positivo de su trabajo en las personas a las que atienden.
Es maravilloso que existan personas como las que hemos conocido en Líbano. Reem, Yasmine, Oula, 
Fátima y tantas otras mujeres empeñadas en que el mundo conozca otra cara del conflicto de Siria: el rostro de las personas y la cara de la esperanza.
El equipo de Gioseppo y de la Fundación Esperanza Pertusa nos sentimos muy orgullosos de haber colaborado con este proyecto. Somos muy conscientes de que nuestra aportación es minúscula frente a la magnitud de la demanda. Como una gota de agua dulce en un mar salado. Pero como yo digo: “no hay una gota pequeña ni insignificante si se dirige al mar que busca sanar el dolor de las personas”.
Esperanza Navarro-Pertusa
Directora de Recursos Humanos y Responsabilidad Corporativa
Gioseppo
